miércoles, 27 de julio de 2011
viernes, 22 de julio de 2011
LA CONDUCCIÓN SE DIVIDE Y PARALIZA NUESTRO SINDICATO
RECUPEREMOS ATE PARA LOS TRABAJADORES
La característica saliente de esta elección nacional de Ate es, sin dudas, el hecho de que la conducción histórica de nuestro sindicato se ha fracturado. La otra novedad es que, como contraparte, centenares de delegados y trabajadores hemos conformado, a nivel nacional, la lista Bermellón opositora que agrupa a todos los sectores que venimos luchando en el gremio contra el trabajo en negro y la miseria salarial.
La división de la conducción, que se terminó de consumar en las elecciones de la CTA, no está asociada a intereses propios de los trabajadores estatales sino al alineamiento de cada fracción con los diferentes bloques patronales, los unos con el gobierno, los otros con diferentes sectores vinculados a la oposición patronal, desde Pino Solanas, pasando por Binner, la UCR y hasta el duhaldismo.
La amenaza de fractura es el resultado de un largo proceso de cooptación de nuestro sindicato que ahora se expresa en la completa parálisis de la directiva que ha visto pasar delante de sus narices la firma de las paritarias salariales, una vez más, muy por detrás de la inflación e incluso del resto de los gremios. Por abajo, sin embargo, allí donde las juntas internas se han plantado, los trabajadores hemos desarrollado las luchas por el salario y el pase a planta y contra la persecución sin ninguna colaboración de la directiva y, en no pocos casos, su boicot abierto.
En oposición a esta división que promueve la actual conducción en sus dos variantes, quienes conformamos la Bermellón venimos practicando la unidad desde abajo a través de las asambleas y plenarios para que seamos los trabajadores los que fortalezcamos nuestro sindicato para la lucha. Para salvar a nuestro sindicato y a nosotros mismos necesitamos una nueva dirección, independiente del gobierno y la oposición patronal que recupere Ate sobre la base de los intereses de sus trabajadores y afiliados.
La característica saliente de esta elección nacional de Ate es, sin dudas, el hecho de que la conducción histórica de nuestro sindicato se ha fracturado. La otra novedad es que, como contraparte, centenares de delegados y trabajadores hemos conformado, a nivel nacional, la lista Bermellón opositora que agrupa a todos los sectores que venimos luchando en el gremio contra el trabajo en negro y la miseria salarial.
La división de la conducción, que se terminó de consumar en las elecciones de la CTA, no está asociada a intereses propios de los trabajadores estatales sino al alineamiento de cada fracción con los diferentes bloques patronales, los unos con el gobierno, los otros con diferentes sectores vinculados a la oposición patronal, desde Pino Solanas, pasando por Binner, la UCR y hasta el duhaldismo.
La amenaza de fractura es el resultado de un largo proceso de cooptación de nuestro sindicato que ahora se expresa en la completa parálisis de la directiva que ha visto pasar delante de sus narices la firma de las paritarias salariales, una vez más, muy por detrás de la inflación e incluso del resto de los gremios. Por abajo, sin embargo, allí donde las juntas internas se han plantado, los trabajadores hemos desarrollado las luchas por el salario y el pase a planta y contra la persecución sin ninguna colaboración de la directiva y, en no pocos casos, su boicot abierto.
En oposición a esta división que promueve la actual conducción en sus dos variantes, quienes conformamos la Bermellón venimos practicando la unidad desde abajo a través de las asambleas y plenarios para que seamos los trabajadores los que fortalezcamos nuestro sindicato para la lucha. Para salvar a nuestro sindicato y a nosotros mismos necesitamos una nueva dirección, independiente del gobierno y la oposición patronal que recupere Ate sobre la base de los intereses de sus trabajadores y afiliados.
NUEVE PUNTOS DE LA LISTA BERMELLÓN
1 - SALARIO IGUAL A LA CANASTA FAMILIAR
Reapertura de las paritarias con delegados electos en asamblea. Mínimo de $5000, aumento no menor al 40% y actualización automática por inflación. $1500 YA!
El salario de los trabajadores estatales es el que ha servido de garantía para el pago de la deuda externa, los subsidios a los grandes capitalistas y el sostenimiento de la caja del estado para domesticar intendentes y gobernadores. Los aumentos salariales siempre han estado por detrás de la inflación y muy lejos del promedio de los trabajadores de otros
gremios. Sin duda hemos sido los más castigados por la carestía. La dirección del sindicato no ha jugado ningún rol para revertir la situación y se ha adaptado una y otra vez a la política del gobierno más allá de alguna que otra movilización testimonial.
Sin embargo, allí donde se ha salido en forma decidida a la lucha, los estatales hemos conseguido aumentos particulares por encima del promedio general, demostrando que es posible romper el techo salarial.
2 - BASTA DE PRECARIZACIÓN LABORAL!!
Pase a planta de contratados, temporarios, becarios y pasantes y fin de las tercerizaciones.
Más allá de los anuncios mediáticos, el Estado nacional y los provinciales se sostienen en base a una enorme masa de trabajadores bajo contratos precarios, y año a año crece su porcentaje. De esta manera el propio estado es el principal evasor y precarizador, como lo hemos venido denunciando claramente tantos estatales y especialmente los propios compañeros del Ministerio de Trabajo. Lo mismo ocurre con las tercerizaciones que comenzaron en los ’90 pero no se han revertido. Muy por el contrario, lo que estaba en un principio acotado a servicios de limpieza y mantenimiento se ha expandido a áreas técnicas y administrativas.
3 - Anulación del impuesto a las ganancias sobre el salario y de los topes y desigualdades en el salario familiar.
El salario no debe ser gravado con ningún impuesto a las ganancias por el sencillo motivo que la ganancia surge, precisamente, sobre la base de una exacción al salario durante el proceso productivo. Reclamamos el fin de la aplicación de este impuesto a los trabajadores y su reemplazo por un impuesto progresivo a los grandes capitalistas. Asimismo, con los topes y desigualdades del salario familiar una inmensa masa de estatales no cobra ni los míseros $220 por hijo falsamente anunciados como “asignación universal”. En muchas provincias, por los topes, los estatales con varios hijos perdieron más dinero por reducción del salario que lo que se les otorgó como “aumento”.
4 - 82 % móvil para nuestros jubilados. Por una ANSES y las cajas provinciales en manos de los trabajadores.
Reclamos la restitución del 82% para nuestros jubilados atado a la evolución del salario de la categoría de retiro. Basta de usar nuestros fondos de la ANSES y las cajas provinciales para pagar deuda externa, paliar déficits presupuestarios y subsidiar grandes capitalistas.
5 - Por planes de lucha escalonados y preparados que permitan ganar. Respeto a los mandatos de base. Basta de acciones desgastantes y testimoniales.
Con la muletilla de que Ate “siempre está en lucha”, la directiva actual promueve acciones rutinarias que de nada han servido a nuestras reivindicaciones. Sin ninguna continuidad y con un contenido a lo sumo mediático y formal. Necesitamos construir planes de lucha reales que integren a los compañeros a un debate con acciones preparadas, progresivas y contundentes. Donde las bases venimos desarrollando estos métodos democráticos y combativos es donde hemos conseguido gran parte de nuestros triunfos y es allí donde se fortaleció la organización de los trabajadores. Nuestra lista, precisamente, representa la unidad de muchas de estas experiencias.
6 - Recuperar las obras sociales, IOMA, OSBA, UP, PAMI para ser administradas y dirigidas por sus legítimos dueños: los trabajadores
La cobertura sanitaria y social de los estatales está en ruinas. El gobierno y la burocracia sindical las ha transformado en enormes cajas y fuente de negociados a costa de la salud y la vida de los trabajadores y sus familias. Ni el gobierno ni la justicia, que sostienen la desregulación, privatización y desfinanciamiento de las obras sociales, serán los que resuelvan el problema a favor de nuestros intereses. Necesitamos recuperarlas poniéndolas bajo control y administración de los trabajadores para terminar con las mafias y el vaciamiento al que han sido sometidas. Que se abran los libros contables y se pongan a consideración y revisión de las asambleas.
7 - Reforma de los estatutos de ATE, revocatoria de mandatos, participación proporcional de las minorías.
Según el actual estatuto de ATE aunque una lista gane por un voto se queda con todos los cargos. Ni siquiera se respeta el porcentaje que sostiene la ley de asociaciones profesionales (vigente incluso en sindicatos de la CGT) que otorga cargos a las minorías. Planteamos que se garantice una representación democrática acorde con la proporción de votos obtenidos por cada lista. El actual estatuto otorga al consejo administrativo la plenitud del poder para determinar a su antojo los criterios para conformar juntas internas y delegados de base lo que ha sido utilizado para perpetuar el unicato de la lista verde. Necesitamos un nuevo estatuto que garantice una verdadera democracia sindical y la independencia de nuestra herramienta gremial con el estado y la patronal.
8 - Basta de persecución, judicialización y despidos a los luchadores.
Hay en el país 5 mil trabajadores judicializados por luchar. Planteamos la defensa incondicional de la Junta Interna del Teatro Colón frente a la escalada represiva del gobierno de Macri. Fuera el FMI, la intervención y la patota del INDEC. Ningún ataque al derecho de huelga ni persecución gremial y política a los trabajadores. No al descuento por parar. Por fondos de huelga bajo control democrático de los trabajadores.
Ningún despido en el Estado.
9 - No al pago de la deuda externa. Abajo el acuerdo con el Club de París.
El pago de la deuda externa que viene haciendo el gobierno nacional bajo el mote de su “política de desendeudamiento” se realiza a costas del esfuerzo del pueblo trabajador. Rechacemos el pago a los acreedores usureros y defendamos nuestras condiciones de vida y la de nuestra familia. Por mayor presupuesto para salud, educación, vivienda, desarrollo social, niñez y adolescencia.
EL 4 DE AGOSTO VOTA
LA BERMELLON
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